Nuestra querida Franja cumplió 80 años, ocho décadas de altibajos, de ver a grandes jugadores portar ese uniforme tan característico en nuestro futbol, de ver a petardos que no sumaron nada en lo deportivo, de ver a directivos hacer historia por este equipo, también de ver a directivos que se dedicaron a dilapidar los recursos del club para beneficios propios, de ver a dueños pelearse hasta terminar en la cárcel, de ver dos campeonatos de liga, cinco de copa, de ver dos descensos, pero también ascensos, pero también de ver a una fiel afición que aunque parece que no, ahí está deseando que siempre le vaya bien a su querido equipo.
Pareciera que con el torneo que recién terminó y que está por demás decir los resultados obtenidos, el festejo por los 80 años de historia es amargo, sin embargo, viendo diversas publicaciones el día de ayer de periodistas de renombre e históricos jugadores del Puebla como Pepe Hanan, Mari Loli Pellón, Luis Tamariz, Antonio Abascal, el “Capi” Ruiz Esparza, entre otros, concuerdo en que hay mucho que festejar, en que este equipo es más que aquellos directivos y jugadores que no han aportado mucho, en especial, el último año.
Un equipo fundado en 1944, con una fiel afición que se mantiene pese a no tener un campeonato desde hace más de 30 años, un equipo con un estadio dos veces mundialista, con una ciudad importante para México, sería imposible describir la vida sin nuestro querido Puebla.
Ojalá que algún día tengamos el equipo que nos merecemos, que exista la oportunidad de tener un buen proyecto deportivo que permita pelear por títulos, porque este deporte de eso se trata de ganar, en la medida que eso suceda, la afición que se ha perdido con las nuevas generaciones se irá recuperando poco a poco, pero eso sí, eso cuesta muchos millones de dólares, lo que quiere decir que esos deseos no dependen de nosotros.
Felices 80 años mi querida Franja, felicidades también a su afición y a esos personajes que desde su trinchera hacen que el Puebla siga importándonos, que vengan mejores tiempos porque ya nos lo merecemos, que nos de la vida para verte campeón nuevamente.