La motivación es una de las variables psicológicas más mencionadas, pero ¿en realidad sabemos qué es?
Usualmente nos preocupamos por mantener a nuestros jugadores motivados, sin embargo salvo en casos específicos, los jugadores siempre lo están, porque hacen lo que les apasiona, viven de su deporte, son conocidos, tienen una muy
buena remuneración económica, etc.
Sin duda hay situaciones específicas que pueden ver afectada esa motivación, como lo es una lesión, una baja en el rendimiento, una ruptura amorosa, problemas personales, la autoexigencia, la creencia de que no es valorado por
el equipo, entre otros factores.
Pero, erradamente nos empeñamos en querer trabajar siempre la motivación de los jugadores, cuando en ocasiones no es primordial, solo se debe monitorear o autorregular.
Pongamos el ejemplo de un equipo en sus fases eliminatorias, la competencia misma esta llena de motivación, están ansiosos por alcanzar los objetivos establecidos, por ser reconocidos, por ganarse los bonos, por mostrar a su
familias y seres queridos lo que son capaces de hacer, por demostrar al torneo mismo y al resto de los equipos que son los mejores.
Entonces, en estos momentos cruciales, el enfoque debe estar más orientado en autorregular esa motivación, y no querer hacer más de lo que se ha venidohaciendo. Pasa mucho qué por estar excesivamente motivados, salen más
agresivos de lo normal y hacen expulsar a un jugador o cometen faltas en zonas inadecuadas, se reclaman entre si, afectando innecesariamente su propio rendimiento.
En estas fases finales, debemos prever otro tipo de situaciones que pueden afectar el rendimiento. Los jugadores están más preocupados sobre que va a pasar con ellos, si les van a renovar o no contratos, si se tendrán que mudar de casa de nuevo, si podrán ser comprados/prestados por otros equipos etc., espor ello qué en la medida de lo posible, debemos aclarar el panorama a los jugadores, y darles cierta seguridad.
Es el momento adecuado para hilar todo el trabajo previo, desde el establecimiento de objetivos inicial que se realizó, la manera en la que se afrontaron situaciones adversas, identificar los mejores momentos individuales y de equipo, resaltar las acciones que los han llevado hasta donde están y enfocarnos en eso, no querer hacer ni más ni menos, visualizar esos momentos y llenarnos de seguridad.
No podemos decir que existe una clave del éxito como tal, es la combinación de muchos factores, sin embargo, en semifinales y finales, la seguridad en si mismos y el trabajo en equipo son dos factores definitivamente claves y
cruciales.
Así que mucho ánimo y apoyo a nuestra franja, vamos a ganarnos ese pase a la final.