[Más Allá del Deporte] Cuando los caminos se cruzan sin previo aviso

Yazberth (11)

A veces, la vida nos sorprende con encuentros que no planeamos, como si el destino jugara con nosotros en un cruce de caminos inesperado.

Dos personas avanzan en direcciones distintas, absortas en sus propios mundos, sin saber que en algún punto, sus trayectorias convergerán.

No hay señales previas, ni premoniciones. Solo sucede. Tal vez sea en una cafetería donde ambos buscan refugio de la lluvia, en un vagón de tren que parecía vacío hasta que se sientan frente a frente, o en un pasillo de supermercado mientras eligen el mismo producto al mismo tiempo.

Un instante compartido que, en otro día o en otra hora, jamás habría ocurrido.Lo curioso de estos encuentros es que, al principio, parecen triviales. Un intercambio de palabras casual, una mirada que no busca nada en particular. Pero hay momentos en los que, sin darnos cuenta, esa persona se convierte en alguien crucial en nuestra historia.

Un amigo, un amor, un aliado en tiempos difíciles.Los cruces de caminos nos recuerdan que no todo está bajo nuestro control. A veces, la vida nos lleva a donde necesitamos estar, incluso cuando no sabíamos que debíamos ir.

Y quizás, en este preciso momento, alguien se dirige sin saberlo hacia ti, del mismo modo en que tú caminas, inconsciente, hacia ellos.

En Línea Deportiva 2024