
Vrksasana, o también conocida como postura del árbol, es considerada una de las asanas de equilibrio más famosas dentro de la práctica de yoga, puesto que representa un gran desafío en vista a la concentración y paciencia que se requiere para su ejecución.
Al ser representada por un árbol, la planta del pie que queda en contacto con la esterilla hace referencia a la raíz, figurando así el enraizamiento que se tiene con la madre tierra, mientras tanto, los brazos simbolizan las ramas creciendo hacia el cielo. Dicha asana es benéfica para personas que padezcan pie plano ya que fortalecerá la musculatura de todo el miembro inferior, además de promover la propiocepción, apertura de cadera y quietud mental.
Toma en cuenta las siguientes recomendaciones durante la ejecución de vrksasana: evita colocar la planta del pie que quedará suspendido en contra de la rodilla para prevenir una lesión, lleva tu mirada hacia un punto fijo (drishti) esto te ayudará a concentrarte y mejorar tu equilibrio y por último disfruta de los aprendizajes que esta postura te proporciona.
Ten presente que todo es un reflejo de tu mundo interno, como es arriba es abajo y como es adentro es afuera. La postura del árbol te recuerda que el equilibrio no se encuentra, se crea.